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La historia de esta mina inicia cuando Francoise J. Fournier llega a El Oro, Estado de México, traído por José Luis Requena, accionista de empresas mineras de El Oro-Tlalpujahua, tales como “El Oro Mining” y “La Esperanza”, para solucionar problemas de desagüe y derrumbes en los complejos de la zona.
Ya estando el investigador francés en la zona, descubre algunos elementos de la formación geológica del lugar, que le sugieren la presencia de mantos auríferos hasta entonces desconocidos. Cabe mencionar que estas vetas habían sido descubiertas originalmente por Ramón Navarrete, pero por falta de recursos y capital se pierden los derechos de explotación.
Los trabajos de excavación del túnel principal de la mina empezaron el 27 de Diciembre de 1899. Para financiar la empresa se emitieron acciones por 300 mil pesos, en Francia y en la Capital Mexicana.
Se cortó la veta en la parte más rica, lo que propició un rápido desarrollo y se implantó la mejor tecnología de ese tiempo. El uso de la electricidad recién descubierta y traída desde Necaxa, Puebla en contrato con la Mexican Light and Power Co. de Luz y Fuerza que también proporcionó ese servicio a la ciudad de México y al centro del país. El óptimo beneficio técnico y económico de la mina se logró con el proceso de Cianuración, que recuperaba hasta 92 % del oro y 72 % de plata, así como el uso de dinamita en vez de pólvora.
Su auge y bonanza fue de 1905 a 1913 en que produjo aproximadamente 45,000 kilogramos de oro y 400,000 kilogramos de plata; y trabajaron en esos años, entre mineros, técnicos y administrativos un promedio de 5,000 trabajadores.
Se perforaban 1,000 metros mensuales de túneles de diferentes niveles cada 30 metros y se calcula que se excavaron entre 150 y 200 kilómetros de socavones, cruceros y tiros. El socavón Dos Estrellas se extendía 1884 metros atravesando el cerro hasta El Oro, Estado de México; el tiro Numero 5 tenía una profundidad de 610 metros desde lo alto del Cerro de Somera.
A partir de 1915, los valores bajaron y para mantener las ganancias se exprimió al trabajador cuyo salario variaba de entre $0.75 a $3.00 pesos y tenían que endeudarse en la Tienda de Raya donde se les cargaban un interés de 48% mensual.
La mina fue un lugar de claroscuros, ya que por una parte, deslumbraba por su tecnología y riqueza, mientras que por otra parte se caracterizaba por su dureza del trabajo y la explotación del minero.
En 1938 los extranjeros optaron por vender la mina presionados por una baja en la producción, la tendencia hacia los precios bajos de los metales, la situación financiera europea difícil por la inminente Segunda Guerra Mundial que se avecinaba, así como la creciente fuerza sindical de los mineros apoyados en los cambios nacionalistas del entonces Presidente Lázaro Cárdenas y sobre todo por un grave accidente en la presa de desperdicios que se reventó el 27 de Mayo de 1937 y genero el trágico incidente de La Tragedia de las Lamas, tema del cual se escribió en la semana pasada.
El origen del nombre de la mina “Las Dos Estrellas”, no esta claro del todo, ya que algunos mencionan que se debe a los dos metales preciosos que sacaban: Oro y Plata, aunque otros dicen que su nombre viene de que la mina esta en municipios de dos estados: Tlalpujahua y El Oro. Existe una tercera versión del nombre, la cual dice que se llamaría así porque eran dos los fundos iniciales y que fueron propiedad de Fournier: Estrella no. 1 y Estrella No. 2, denominados así en base a el mismo y a su primera esposa Claudín Calvayrac.