Al iniciar Miguel Hidalgo y Costilla el movimiento de Independencia en la ciudad de Dolores la noche del 15 de Septiembre de 1810 y viéndose en la necesidad de una bandera o estandarte para continuar su lucha, llega al Santuario de Atotonilco en el estado de Guanajuato, y toma de la sacristía del curato un óleo con la Virgen de Guadalupe, el cual es adoptado como bandera de las tropas insurgentes.
Por otro lado, las fuerzas realistas al enterarse de lo hecho por el Cura Hidalgo, y buscando una forma de contrarrestar la actitud del grupo independista, adoptan a la Virgen de los Remedios, la cual es venerada en el santuario del mismo nombre en la Ciudad de México, dándole el grado de «Mariscala”.
El estandarte tiene impresa la leyenda Viva María Sma de Guadalupe y y aparece por ambos lados con los escudos de la provincia franciscana de San Pedro y San Pablo de Michoacán
De todas las banderas o estandartes que se utilizaron en el movimiento de Independencia, el Estandarte de Hidalgo o Estandarte de la Virgen de Guadalupe, es uno de los mas representativos y conocidos de la historia de México.